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WikiJuanan: Cancionero ...

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Acordes guitarra

Letras

Sevillanas de la reina

Es rubia como los trigos,
a la salida del sol,
tiene los ojos azules,
como el romero la flor.


Cuando la vio el rey de España,
Don Alfonso de Borbon,
como un novio enamorao,
le ha dao su corazon.


Que bien parece, Dª Victoria Eugenia,
que bien parece, Dª Victoria Eugenia y Alfonso Trece.


Cartes ivan y venian,
desde Londres a Madrid.
estoy loca vida mia,
y tu loquito por mi.


En el palacio de oriente.
todo es risa juvenil,
Dª Cristina sonrie,
de ver su hijo tan feliz.


Que bien parece Dª Victoria Eugenia,
que bien parece, Dª Victoria Eugenia y Alfonso Trece.


El treinta y uno de Mayo,
bajo un sol de primavera,
era un asta de alegria,
San Jeronimo el Real.


La novia entra en el templo.
con graciosa majestad,
de castillos y leones,
era su traje nupcial.


Dª Victoria, fue la reina mas guapa,
Dª Victoria, fue la reina mas guapa que dio la historia.


Cuando vuelven de la boda,
y ya en calle mayor,
una bomba entre las flores,
le han tirao desde un balcon.


El traje blanco de novia,
de algo se le mancho,
Dª Victoria sonrie,
y el rey le dio una flor.


Y se estremece, cuando mira a su reina,
y se estremece, cuando mira a su reina, Alfonso Trece.

Tiempo detente

Cantaban a la Virgen poemas.
Poemas, cantaban a la Virgen poemas, cantaban a la Virgen poemas.
Poemas, los juncos de la orilla del Quema, los juncos de la orilla del Quema.
Tiempo detente, que es tan grande el consuelo que mi alma siente, que duren mis anhelos eternamente.


Inmensidades verdes los pinos.
Los pinos, inmensidades verdes los pinos, inmensidades verdes los pinos.
Los pinos, y quebrando el silencio los trinos y quebrando el silencio los trinos.
Tiempo detente, que es tan grande el consuelo que mi alma siente, que duren mis anhelos eternamente.


Alfombra de mis pasos la arena.
La arena, alfombra de mis pasos la arena, alfombra de mis pasos la arena.
La arena, y tu esperanza alivia mis penas, y tú esperanza alivia mis penas.
Tiempo detente, que es tan grande el consuelo que mi alma siente, que duren mis anhelos eternamente.


Perfiles de tu ermita mi canto.
Mi canto, perfiles de tu ermita mi canto, perfiles de tu ermita mi canto.
Mi canto y al mirarte a los ojos mi llanto y al mirarte a los ojos mi llanto.
Tiempo detente, que es tan grande el consuelo que mi alma siente, que duren mis anhelos eternamente

La leyenda de la aparición

Cuando el aire era más puro y la marisma más verde;
cuando al nacer la mañana volaban patos silvestres ;
cuando el Coto de Doñana era una alfombra celeste
y el cielo se reflejaba en los lucios trasparentes.


Completamente redondo, estaba el sol amarillo
y besaba el horizonte bañándolo con su brillo
Las nubes, tímidamente, se teñían de naranja
y se alargaban las sombras de los pinos, verde y malva.


Rompió el silencio de siglos un ladrido en la Rocina ;
junto a un reseco acebuche los perros se arremolinan ;
por el viejo tronco asoma una cara tan divina
que el cazador, emocionado, cae al suelo de rodilla.


Quien hubiera sido tu, cazador de la marisma
para quedar sorprendido y ser el primero en ver
a la Virgen del Rocío.

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